El 24 de febrero tras la invasión rusa, comenzó la guerra entre Ucrania y Rusia.
Una Ucrania desamparada y prácticamente aislada se encuentra indefensa ante el poderoso país ruso.
Esta inmensa superioridad ha desencadenado la muerte de una cifra cercana a los 3000 ucranianos, asimismo, se estiman unos 3700 heridos.
Ante estos escalofriantes datos el mundo, aunque tímidamente, ha empezado a movilizarse. Sevilla no ha sido menos y ha comenzado una recogida de ayuda humanitaria.
Recogida de alimentos
La iglesia ucraniana de Sevilla, situada en la Calle Santa Clara, recibe diariamente la ayuda de los vecinos. A la iglesia llegan medicamentos, ropa y comida, los cuales cuando llegan a una cantidad considerable son enviados a Alicante.
Desde Alicante, estos enseres se transportan a la frontera entre Polonia y Ucrania.
Cabe destacar que este no es el único punto de recogida, también, junto con este templo, hay otros dos puntos de recogida de material para el pueblo ucraniano: la barriada de la Oliva y la Avenida de la Paz, ambas situadas en el Polígono Sur.
‘Las Hermandades de Sevilla con el corazón de Ucrania’
Las hermandades de la ciudad, han puesto en marcha una campaña de donativos para ayudar a los refugiados ucranianos que está dejando esta guerra.
El Consejo General de Hermandades y Cofradías de Sevilla pone en marcha el proyecto ‘Las Hermandades de Sevilla con el corazón de Ucrania’ unido a Fraternitas.
Fraternitas es un proyecto de ayuda a los más necesitados que tuvo un papel crucial durante la pandemia ayudando a cientos de familias con problemas.
El Consejo General de Hermandades y Cofradías de Sevilla inicia pues, una gran campaña solidaria con la que pretende ayudar al pueblo ucraniano y a aquellos refugiados que se han visto obligados a huir de las continuas hostilidades que acechan a su pueblo.
“Los donativos se podrán realizar a través de Bizum, al número 00345, así como por transferencias bancarias a la cuenta: ES12 2100 8688 7702 0008 9027”.
Sevilla se moviliza
A estos gestos materiales, se le suman otros gestos simbólicos como muestra de rechazo ante este lamentable suceso.
El pasado día 24 de febrero, en la previa al partido entre el Betis y el Zenit, una gran masa de aficionados béticos se unió a una protesta ucraniana frente a la guerra. Dejando así una emotiva imagen
Destacable también lo sucedido el día 27 de febrero en Plaza Nueva, con una movilización de más de 200 ucranianos residentes en la ciudad bajo el lema “No a la guerra” y “Ucrania quiere paz”.